Declaración del Partido de Izquierda
El Partido de Izquierda se pronuncia por la más completa e incondicional solidaridad con los migrantes centroamericanos quienes buscan ingresar a Estados Unidos en calidad de asilados o refugiados.
Rechazamos la militarización de la frontera del gobierno de Trump quien ha enviado 5,800 tropas. Esto no es más que un acto de agresión al derecho de asilo y de refugio de los integrantes del éxodo migrante centroamericano.
Trump busca exacerbar sentimientos anti inmigrante, tanto aquí como en México, pretendiendo sacar algún rédito político para el Partido Republicano. Trump ha demostrado que busca alentar estos mismos sentimientos racistas nacionalistas en otras partes del mundo incluyendo países del norte de Europa.
Trump utilizó la falsa amenaza de una supuesta ‘invasión’ para movilizar a su base electoral para las pasadas elecciones intermedias y no hay indicios de que vaya a retroceder de estas acusaciones. Su intento de prohibir el derecho de petición de asilo a los migrantes que logren cruzar la frontera ha fracasado por ahora pero se esfuerza por mantener una situación de crisis artificial, limitando la cantidad de pedidos de asilo que procesa por día. Trump pretende ahora que los pedidos de asilo sean tramitados sin que los migrantes ingresen al territorio. norteamericano lo que le facilitaría hacer lo que se le antoje.
Sectores derechistas en México se han hecho eco de los ataques de Trump a los migrantes centroamericanos, desde el alcalde de Tijuana del Partido Acción Nacional hasta sectores de la clase media mexicana que ahora se pretenden nacionalistas. Estos sectores reaccionarios mexicanos le hacen el juego a los supremacistas blancos en Estados Unidos.
Los dirigentes Demócratas por su parte han guardado un estricto y vergonzoso silencio frente al éxodo migrante porque necesitan ocultar su propia hostilidad al mismo.
Con su silencio los Demócratas pretenden ocultar también su propia responsabilidad por la crítica situación social en Centroamérica. Fue precisamente bajo la administración de Obama, con Hilary Clinton al frente de su diplomacia, que se orquestó el golpe de estado en Honduras en el 2009. Esta intervención norteamericana desató la violencia estatal contra la población y contra los defensores de los derechos territoriales de las comunidades originarias y han llegado a asesinar dirigentes como Berta Cáceres quienes intentan resistir la ofensiva de las corporaciones por adueñarse de los recursos naturales.
Más aún, ahora mismo Hillary Clinton llama a los europeos a adoptar políticas más duras contra los inmigrantes para supuestamente contrarrestar al ‘populismo de derecha.’ Los inmigrantes en Estados Unidos no olvidamos que Obama fue quien más deportaciones hizo durante su gobierno y que ni Trump alcanzó su récord de deportaciones durante su primer año de gobierno.
Desde el Partido de Izquierda nos pronunciamos por una política de fronteras abiertas y por papeles para todos, en contra de la separación de las familias así como en contra de la separación de los hijos de sus padres.
Nos pronunciamos también por la reunificación socialista de México con los territorios robados por Estados Unidos y por un gobierno basado en el control democrático de los trabajadores y un plan democráticamente centralizado de desarrollo económico y social. Nos pronunciamos también por la reunificación de Centroamérica con México porque somos el mismo pueblo y tenemos la misma lucha.
¡Las luchas obreras no tienen fronteras!
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